The Strand Magazine fue una revista publicada mensualmente con una mezcla de artículos e historias de ficción escritas por los más notables autores de la época. Fundada por George Newnes, se publicó en el Reino Unido desde 1891 hasta 1950. Obtuvo rápidamente una gran popularidad y sus ventas subieron todavía más en los primeros meses. Esta fama se mantuvo hasta entrados los años 30.
Algunos de los autores que publicaron en la revista fueron Arthur Conan Doyle, Ernest William Hornung, Grand Allen, Margery Allingham, H.G. Wells, E.C. Bentley, Agatha Christie, C.B. Fry, Walter Goodman, E. Nesbit, W.W. Jacobs, Rudyard Kipling, Arthur Morrison, Dorothy L. Sayers, Georges Simenon, Edgar Wallace, Max Beerbohm, P.G. Wodehouse, Dornford Yates e incluso Winston Churchill. Una vez apareció en la revista un dibujo de la Reina Victoria y uno de sus hijos, con el permiso de ambos.
Historia
The Strand comenzó a publicarse en enero de 1891 y desde el comienzo fue un éxito. Se vendieron cerca de 300,000 copias cada mes durante los siguientes 40 años en Reino Unido, y unas 100,000 copias más a partir de 1916 en los Estados Unidos. Se caracterizaba por las ilustraciones que se dedicaban a las historias que la componían, así como una página de acertijos por publicación.
En una entrevista que se le hizo a Newnes, este comentó que la revista originalmente se llamaría Burleigh Street Magazine, pero que consideraron el nombre demasiado largo, por lo que optaron por llamarla Strand Magazine.
Motivado por la disminución en el precio del papel y el incremento de la población que sabía leer y escribir (cosa que sucedió al final del siglo XIX), George Newnes funda la revista. La audiencia a la que estaba dirigida era al número creciente de hombres que vivían en los suburbios de Londres que debían tomar el tren hacia la ciudad y de vuelta a casa. The Strand podía ser comprada en las librerías del ferrocarril y prefería publicar historias lo suficientemente cortas para ser leídas durante el recorrido.
Una de las razones principales de su éxito es algo que no muchos conocen y es que fue la primera revista en incluir dentro de sus páginas una sección de acertijos. En los primeros años del siglo XX, la revista tenía una sección llamada Perplexities, que incluían acertijos, y la aparición de los primeros crucigramas numéricos (que son iguales a los crucigramas de palabras, pero éstos incluían tan sólo números). Desde 1910 y hasta su muerte en 1930, el autor de estas “perplejidades” fue el genio matemático Henry Dudeney.
La portada
Su primera portada fue diseñada por George Charles Haité, misma que utilizaron durante casi toda su historia y es considerada un verdadero icono de la ilustración.
La ilustración de Haité muestra la vista este a lo largo de la Avenida Strand mirando hacia la iglesia de St. Mary-le-Strand. La avenida Strand fue considerada una vía pública de moda y une a la ciudad de Londres y a la catedral de San Pablo con el palacio de Buckingham, las casas del parlamento y Whitehall.
La revista se convirtió en un símbolo y Smith se negó a jugar con la fórmula de su éxito ya que los lectores (particularmente los lectores regulares) son criaturas de hábitos. Es por eso que la portada permaneció sin cambios durante gran parte de su historia. Sin embargo hubieron factores que obligaron a hacer pequeños cambios en la portada.
El primero de los cambios fue la mudanza de las oficinas de la revista, cuya dirección aparecía en la portada, por lo que hubo que cambiarla. Pronto también se incluyeron líneas de texto para promocionar otras revistas del grupo. De igual modo, en los números navideños se comenzó a hacer algunas modificaciones al aspecto y en ocasiones la portada fue coloreada por completo. Llegó el punto en el que se comenzó a incluir ilustraciones en la portada para hacer hincapié en las historias que incluía el volumen, sin embargo la imagen continuaba generalmente sin cambios. Esto fue hasta el año de 1922 en el que los transeúntes de la ilustración fueron cambiadas drásticamente y la imagen se renovó para ilustrar el Londres de la época.
Sherlock Holmes
Sin lugar a dudas, The Strand es famosa debido a ser el primer lugar en el que se publicaron las historias de Sherlock Holmes. El detective de Arthur Conan Doyle y particularmente El sabueso de los Baskervilles fueron responsables del boom de la revista, llegando a vender medio millón de copias por mes durante la serialización de dicha historia.
En resumen Arthur Conan Doyle publicó en la revista 121 historias cortas, 70 artículos, 9 novelas serializadas, 2 entrevistas y 1 poema.
En cuanto Newnes le pidió a Sir Arthur Conan Doyle que escribiera historias cortas para The Strand, Doyle tuvo la idea de escribir historias auto-contenidas para cada copia, de modo que retomara los mismos personajes volumen tras volumen. De este modo Doyle resolvió el principal defecto de las novelas serializadas: si los lectores se perdían un volumen, se perdían de leer eventos claves de la trama, lo que significaba que perdían interés en la historia. La estrategia de Doyle fue un éxito y si The Strand vendía generalmente 300,000 copias, los volúmenes con historias de Sherlock Holmes incrementaban las ventas hasta 500,000.
De igual modo, Newnes le pidió a Sidney Paget que elaborara ilustraciones para acompañar las historias de Doyle. Insistió que las ilustraciones debían ser congruentes con la trama y en especial para los volúmenes en donde se incluían historias de Sherlock Holmes, pidió una ilustración por cada hoja, si no en cada página. Paget dibujó a Holmes alto y esbelto, frecuentemente fumando una pipa. A Watson lo dibujó fornido y con un enorme bigote. Las ilustraciones de Paget son responsables de la imagen asociada con Sherlock Holmes y el Dr. Watson hoy en día.
El fin
En 1930 ocurrieron dos eventos que cambiarían el curso de la revista para siempre. En primer lugar fue la muerte de Arthur Conan Doyle el 7 de julio, y ese mismo año, en diciembre, Smith abandona la edición de la revista que había mantenido funcionando desde el principio. La mancuerna Smith/Conan Doyle era una apuesta segura y ninguna otra revista podía compararse, sin embargo en 1930 la mancuerna murió por completo.
En 1941, debido a la segunda guerra mundial, se racionalizó el papel de imprenta, por lo que la revista cambio a un formato más pequeño.
Aunque la calidad de las ilustraciones era mejor, la portada siguió cambiando drásticamente y nunca consiguió recuperar el viejo encanto, por lo que las ventas decayeron. Finalmente, la revista dejó de publicarse en marzo de 1950, forzada a abandonar el mercado por poca circulación y el aumento de los costes.
Actualmente The Strand Magazine se publica nuevamente, esto sucedió en 1998 y continúa con la costumbre de publicar historias de famosos autores como John Mortimer, Ray Bradbury, Alexander McCall Smith, Ruth Rendell, Colin Dexter y Edward Hoch.
Fuentes
https://es.wikipedia.org/wiki/The_Strand_Magazine
http://thevictorianist.blogspot.mx/2013/04/american-magazines-were-supplanting.html
https://magforum.wordpress.com/2016/05/31/the-strand-magazine-and-its-iconic-cover/
http://orgs.utulsa.edu/spcol/?p=1946